Porque Dios es Creador y los hizo Su pueblo manifestando Su bondad, fidelidad y misericordia, el pueblo, con placer y gozo, debe alabarlo con acciones de gracias al SEÑOR.
Salmo 100:1-2:
Aclamad con júbilo al Señor, toda la tierra.
2 Servid al Señor con alegría;
venid ante El con cánticos de júbilo.
El salmista nos invita a hacer dos cosas: aclamar y servir al Señor. Aclamar implica que alguien grita de alegría porque está tan lleno de gozo que no puede expresarlo con palabras. Pero, con ese mismo gozo debemos servir a Dios. Servir es ser esclavo, pero ser esclavo del Señor puede ser fuente de gozo. Agustín de Hipona comentó esta parte del salmo diciendo: «Toda esclavitud es amarga... No temas la esclavitud de aquel Señor... Gran dicha es ser siervo en esa gran casa... Junto al Señor, la esclavitud es libre, porque no sirve la necesidad, sino la caridad... Que la caridad te haga siervo, ya que la verdad te hizo libre».
Pero ¿por qué deben aclamar, servir y venir al SEÑOR con placer y gozo? Dice el Salmo 100:3
Sabed que El, el Señor, es Dios;
El nos hizo, y no nosotros a nosotros mismos;
pueblo suyo somos y ovejas de su prado.
“Sabed” es reconocer, estar consciente que el SEÑOR es Su Dios y Hacedor. El salmista dice al pueblo de Israel que ellos deben estar conscientes que Dios los creó como pueblo y nación. Él hizo de una masa de esclavos un pueblo libre. Esto no era un fin en sí mismo, sino que los hizo para que ese pueblo fuera de Él, de Su posesión. (Éxodo 6:6-8)
Salmo 100:4: Entrad por sus puertas con acción de gracias,
y a sus atrios con alabanza.
Dadle gracias, bendecid su nombre.
“Acción de gracias” es mucho más que simplemente decir gracias. Es dar gracias a Dios por las obras (pasadas o presentes) que Dios ha hecho en la vida de un individuo o comunidad, a menudo acompañadas por sacrificio. Como Pr. Javier Domínguez lo ha explicado en diferentes enseñanzas: “[…] dar gracias a Dios, en la Biblia, es la acción de dar crédito a Dios en todo lo que hacemos. Dar gracias es la acción de aprobar la obra de la gracia de Dios en nuestra vida. Dar gracias no es solo una actitud, sino acciones externas […] que damos a Dios que demuestran nuestra actitud interior”.
El salmista les dice que deben entrar al templo con acción de gracias, pero también con “alabanza”, esto quiere decir ofreciendo palabras de homenaje como un acto de adoración a Dios por quién es Él. Pero además de entrar con acción de gracias y alabanza ¿Qué debían hacer ellos? “Dar gracias”, es decir expresar gratitud o mostrar apreciación, ¿cómo harían esto? “Bendiciendo el nombre de Dios” esto significa hablar palabras de excelencia por quien Dios es y por lo que Él ha obrado.
Pero ¿por qué deben dar gracias, alabar y bendecir el nombre de Dios? Esto lo responde el Salmo 100:5
Porque el Señor es bueno;
para siempre es su misericordia,
y su fidelidad por todas las generaciones.
Dios nos ama lealmente y guarda las promesas y el pacto, cumpliendo Su palabra. Él es consistente a su nombre, carácter y su palabra.
La misericordia, bondad y fidelidad de Dios se manifestaron perfectamente en la persona y obra de JESUCRISTO. Esto era necesario por causa de nuestro pecado que ofende a Dios y nos separaba de Él, vivíamos confiando y dependiendo de nosotros mismos, ignorando que Dios es nuestro Hacedor.
Fue hasta que ese Hacedor encarnó y se manifestó en el mundo como nuestro Redentor que pudimos ser pueblo Suyo y ovejas de Su prado. Por eso Jesús dijo en Juan 10:11-16: “Yo soy el buen pastor; el buen pastor da su vida por las ovejas.12 Pero el que es un asalariado y no un pastor, que no es el dueño de las ovejas, ve venir al lobo, y abandona las ovejas y huye, y el lobo las arrebata y las dispersa. 13 El huye porque sólo trabaja por el pago y no le importan las ovejas.14 Yo soy el buen pastor, y conozco mis ovejas y las mías me conocen, 15 de igual manera que el Padre me conoce y yo conozco al Padre, y doy mi vida por las ovejas. 16 Tengo otras ovejas que no son de este redil; a ésas también me es necesario traerlas, y oirán mi voz, y serán un rebaño con un solo pastor”.
Por lo tanto, toda acción de gracias que hacemos procede del acto más grande de gracia que ha habido: el evangelio.
¿Por qué debemos alabar y dar acciones de gracias al Señor con placer y gozo? Porque Jesús es nuestro Creador y Redentor y nos ha hecho Su pueblo manifestando Su bondad, fidelidad y misericordia.
El próximo jueves 19 de noviembre congréguese para dar Acción de Gracias con placer y gozo.