Catorce de febrero y el mundo lo celebra según su cosmovisión. Celebran el día de San Valentín, el día del “amor y la amistad”. No voy a entrar hablar de los orígenes de esta celebración, ni porque no debería llamársele el día del “amor” pues antes de esa fecha encontrará muchos artículos refutando esta celebración en todos sus aspectos.
El punto al que deseo referirme es al afán que muchos tienen por encontrar o tener una pareja, “novia(o)” para esa fecha y que lastimosamente muchos creen, en especial algunos jóvenes cristianos, que si ese día no tienen a ese “alguien” pasarán tristes y deprimidos. Mientras se llega el momento de conocer a esa persona que le estará acompañando el resto de su vida como su esposa(o) el Señor les aconseja acerca de la soltería y que la puedan vivir plenamente con gozo y satisfacción. Quiero referirme en este artículo a solo dos aspectos (hay muchas más), para poder vivir nuestra soltería para gloria de Dios.
1. Debemos cambiar nuestro pensamiento acerca de “una” fecha porque todas son iguales. No existe el día del amor y la amistad, tal pensamiento pone un límite y es un total desconocimiento del verdadero amor. En otras palabras, ese tipo de pensamiento egoísta nos dice “que solo puedes amar y mostrar amor en una sola fecha”. La Biblia nos dice en 1 Juan 4:7-8 Amados, amémonos unos a otros; porque el amor es de Dios. Todo aquel que ama, es nacido de Dios, y conoce a Dios. 8 El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor. Dios es amor y solo aquel que es nacido de y por medio de Él puede amar verdaderamente. ¿Puedes darte cuenta de que no es un día? Nos manda amar siempre como Dios ama, ¿Por qué? Porque el amor es de Dios y no es como este mundo lo presenta.
2. Como solteros deberían asumir una genuina preocupación. 1Corintios 7:32 “Quisiera que estéis libres de preocupaciones. El soltero se preocupa de las cosas del Señor, de cómo agradar al Señor”. Lo que Pablo está diciendo es acerca del soltero y su preocupación por agradar al Señor, además el mismo texto menciona “Quiero que estén libres de ansiedad, de preocupación, o de congoja”, esto debería ser lo único que a usted como soltero le debería dar propósito de vida y no dejarse llevar al pozo de la tristeza y del afán, “el agradar al Señor”.
Como solteros están libres de las preocupaciones que tienen los que estamos casados y se pueden preocupar de las cosas que pertenecen a la iglesia de Jesucristo. El que está soltero tiene la oportunidad de pasar todo el tiempo poniendo su mente, sus fuerzas, su tiempo y habilidades en todo lo que le agrada al Señor, ocupándose de las cosas de Su Reino, una vez más esto da a la soltería un propósito definido “agradar al Señor”. No importa en qué ministerio esté sirviendo, el cristiano soltero es diligente y se preocupa de promover la causa de Cristo siempre y no el afán por encontrar una pareja, pues sabe que Dios en su tiempo orquestará todo para que usted conozca a quien será su esposa o su esposo. Amén
Pastor Asociado a cargo del Departamento de Comunicaciones