Una soltería con propósito

En Dinamarca existe la costumbre que, a los solteros, entre los 25 y 28 años de edad, sus familiares y amigos les echan canela para que se casen pronto, pero si pasan de 30 años les echan pimienta  y  así como esta extraña costumbre, en la actualidad abundan muchas opiniones contrarias a la Biblia dentro y fuera de la iglesia. De las cuales quiero destacar dos:  

• Algunos piensan que la soltería es solamente un período intermedio, casi trágico, en el que se debe de sobrevivir para poder llegar al matrimonio. Piensan que la verdadera vida, plenitud y madurez se alcanza al casarse y establecer una familia., pero la Biblia describe la soltería como algo más que un período de espera.
• Otros creen que la soltería es para enfocarse en ellos mismos: divertirse y alcanzar sus metas académicas, laborales y profesionales. Ven la soltería como un tiempo de libertad prolongada para dedicarse al placer y disfrute propios y cuando se cansen de eso pueden pensar en el matrimonio. Pensar así muestra que como cristianos no han establecido bien sus prioridades de vida haciendo del deleite, placer y libertad algo más importantes.

Entonces, ¿Cuál es el propósito de la soltería? O para ser más específicos: ¿Cómo se relaciona la soltería con los propósitos de Dios?

En primer lugar, quiero aclarar que los solteros son importantes en las iglesias locales porque en el nuevo pacto, tanto solteros como casados, forman parte de la familia principal: la de Dios. Dice Gálatas 3:28: “No hay judío ni griego; no hay esclavo ni libre; no hay hombre ni mujer, porque todos son uno en Cristo Jesús.” Esto quiere decir a ser redimidos por Cristo y estar unidos a Él, no podemos decir que alguien es más importante en la iglesia, sino que todos somos uno en Cristo. Eso incluye a los solteros y a los casados.

En segundo lugar, la soltería ofrece oportunidades y pruebas de santificación las cuales, más que prepararte para el matrimonio, te preparan para disfrutar más plenamente la vida eterna aquí en la tierra y después en el cielo. Esto quiere decir que tu vida de santificación no depende de tu estado civil, sino de como estás viviendo en obediencia y adoración a Dios hoy en la decisiones que tomas y las cosas que haces.

En tercer lugar, como John Piper afirma en su libro Pacto Matrimonial, así como el matrimonio tiene un llamado y responsabilidad en el reino de Dios, también la soltería trae consigo un llamado y responsabilidad únicos. Este llamado único de los solteros cristianos es exaltar a Cristo, Su verdad y Su reino por medio de una vida de devoción a Él, de pureza en sus relaciones y servicio en su iglesia local.

Viviendo de esta forma podrás mostrar al mundo y a la iglesia que la familia de Dios no crece por procreación, sino por regeneración; por lo tanto, en tu soltería debes procurar hacer discípulos por medio de la proclamar el evangelio. Esto con la consciencia que las relaciones en Cristo son más permanentes y preciosas que cualquier otra relación terrenal   y que, por lo tanto, el estado civil no define el valor de tu vida, sino la fidelidad a Cristo. Ninguna relación familiar es suprema, la relación con Cristo sí lo es (Mateo 12:48-50; Lucas 11:27-28; Marcos 10:29-30).

¿Cuál es el propósito de la soltería? Es exaltar a Cristo, Su verdad y Su reino por medio de una vida de devoción a Él, de pureza en sus relaciones y servicio en su iglesia local.